Familiares de residentes del Centro Vitalitas de Barakaldo denuncian una atención «deficiente»
Tres representantes de 69 usuarios y usuarias del centro de Bagatza acuden a la Comisión de Peticiones y Relaciones con la Ciudadanía de las Juntas Generales de Bizkaia para mostrar su “preocupación” por la gestión del centro concertado.
(Bilbao, a 22 de octubre de 2021). La Comisión de Peticiones y Relaciones con la Ciudadanía de las Juntas Generales de Bizkaia ha recibido hoy la visita de la agrupación de familiares de la residencia Vitalitas de Barakaldo. En representación de 69 residentes del centro, María Isabel Renovales Oliva, María Purificación Pérez Aribayo y Mariví Freire Pérez, han criticado la “deficiente” gestión que está realizando el Grupo Vitalia Home en su residencia de Bagatza (Barakaldo), que está repercutiendo desde agosto del año pasado de manera “negativa” en el estado de salud y cuidados de los internos.
La agrupación de familias de la residencia de mayores Vitalitas Barakaldo ha denunciado el “empeoramiento de la salud” que sufren “de forma generalizada” las personas mayores dependientes que viven en este centro financiado en parte por la Diputación foral de Bizkaia y que funciona desde hace más de 15 años en el barrio de Bagatza.
El colectivo ha hecho pública la situación en la Cámara vizcaína tras intentar repetidamente obtener una solución, tanto por parte de la empresa, Grupo Vitalia, como por la Institución foral, ante las que se han presentado en los últimos meses diversas quejas colectivas sobre el estado físico y emocional de los residentes. Los grupos junteros han recibido también un informe “detallado” de la situación de sus familiares.
Las familias han puesto fecha al inicio de estas irregularidades coincidiendo con la protesta sindical que trabajadoras del centro iniciaron en agosto de 2020 para denunciar la falta de personal para atender a los residentes. A raíz de la “sobrecarga” de trabajo de la plantilla, los familiares han detectado “falta de higiene” , “problemas con la ropa y la limpieza”, “deficiencias en la alimentación y en la administración de medicamentos”. Son condiciones “inaceptables” que se están produciendo en el cuidado de la “mayoría” de los residentes.
El grupo ha alertado, en este sentido, de las “carencias” que se está produciendo durante la pandemia de covid-19 y han lamentado la “falta de transparencia e información” por parte de la residencia, que es la “máxima responsable” de esta situación, criticando también a la Diputación, en su caso “por no inspeccionar”.
Asimismo, las tres allegadas han querido agradecer el trabajo de los trabajadores y trabajadoras del personal que “hacen lo que pueden” al sufrir una “sobrecarga” evidente. En estos momentos la plantilla está “desanimada y sufre un bajón anímico”.
Respecto a la labor de la Diputación, los familiares demandan que, en el cambio de modelo de residencias, se empiece por mejorar las condiciones laborales de las trabajadoras, y se siga por elevar los ratios de atención y mejorar la formación del personal.
Los familiares han lamentado también que el departamento de Acción Social solo cuente con “7 inspectores” para todas las residencias de Bizkaia, criticando que la media de inspecciones en los centros de mayores durante este año “no llegue ni a una”. Han pedido que los resultados de estas inspecciones se hagan públicos para que la ciudadanía tenga información a la hora de elegir un centro, y que se apueste por un modelo “participado” en donde a las familias se les pida opinión. “No se habla con las familias”, ha asegurado Mariví Freire.