El primer pato fabricado con material de origen vegetal surcará la Ría el próximo 3 de octubre

 El primer pato fabricado con material de origen vegetal surcará la Ría el próximo 3 de octubre

El primer pato fabricado con material de origen vetegal surcará la Ría el próximo 3 de octubre

El primer pato fabricado con material de origen vetegal surcará la Ría el próximo 3 de octubre
El primer pato fabricado con material de origen vetegal surcará la Ría el próximo 3 de octubre

Los tickets para participar en la novena Estropatada de The Wak on Project (WOP) ya se pueden comprar online

Cada entrada se une al fin social de WOP: sumar minutos de lucha para investigar enfermedades neurodegenerativas

El mundo ya conoce al biopato: el primer pato del planeta que se ha fabricado con material de origen vegetal y que surcará la Ría de Bilbao el próximo 3 de octubre en la popular Estropatada de The Walk On Project (WOP).

Esta mañana el biopato se ha presentado en rueda de prensa, siendo Yimby el escenario elegido y bajo la atenta mirada de periodistas y de los propios partners del evento ¡nadie lo había visto hasta ese momento! Representantes de Fundación La Caixa, El Correo, Metro Bilbao, Fundación EDP, López Landa, Toyota Japancar, Surne, El Corte Inglés, Itsasmuseum, Zubiarte y Eroski han podido conocer en persona y antes que nadie a este exclusivo biopato.

También ha apoyado la esta presentación Itziar Urtasun, concejala de Cooperación, Convivencia y Fiestas del Ayuntamiento de Bilbao, quien también ha descubierto a este exclusivo biopato. Un pato nada convencional, pues es el resultado de varios años de investigación.

Los tickets para participar en esta histórica carrera y novena Estropatada están a la venta en wopato.com y numerosos puntos de venta. Cada ticket, además, se une al fin social de WOP: sumar minutos de lucha para investigar enfermedades neurodegenerativas.

Y los patos ganadores conseguirán grandes premios: el uso del nuevo Toyota Yaris (gracias a Toyota Japancar), una ruta con Bilbobentura y cheques regalo de El Corte Inglés, Zubiarte y Eroski.

FRUTO DE UN PROYECTO DE I+ D 

Si ya el primero de los patos de la Estropatada de 2013 resultó fruto de un proyecto de I+D ahora, de nuevo, la recuperación de los patitos vuelve a ser posible gracias a la investigación internacional de la mano de varias organizaciones vascas con un largo recorrido de I+D en materiales alternativos a los plásticos tradicionales: Rotobasque, Urlaplast y GAIKER.

El pato era un elemento fundamental. Desde el momento de la renuncia hace dos años comenzamos un camino en la búsqueda de las posibilidades sostenibles de volver a los patos, nuestro elemento significativo. Por fin lo hemos conseguido. Desde lo local, porque tres empresas vascas, resultado de un proyecto de investigación de tres años, han conseguido un material biodegradable que puede ser inyectado y rotomoldeado”, ha explicado Mikel Renteria, fundador de WOP.

Es un gesto en el camino de adaptarnos y conseguir como sociedad eliminar los plásticos tradicionales por otros materiales más sostenibles. Supone una inversión importante para nosotros, pero estamos muy ilusionados porque vuelven los patos y de una manera sostenible. Es la primera experiencia a nivel mundial de los famosos patitos de bañera con material de origen vegetal y no exotóxicos. Volveremos a recogerles, como todos los patos de las anteriores Estropatadas”, explica Renteria.

En el año 2019, la Fundación WOP sorprendió con la eliminación de estos patos de plástico de la carrera y su sustitución por piñas de pino como elemento biodegradable. Se eliminaban los patos de plástico como elemento central del evento Estropatada.

En el mes de mayo de 2019 Renteria explicó así la decisión: “Ha llegado el momento del cambio. Debemos romper inercias y acelerar al máximo en la puesta en marcha de acciones en nuestra lucha contra los plásticos. Se trata de un cambio que llevamos meditando mucho tiempo y hemos decidido implantarlo ya, aunque suponga un esfuerzo muy importante para nosotros. Estamos especialmente sensibilizados y comprometidos con los aspectos medioambientales desde la creación en el año 2013 de la Estropatada, lo cual ha supuesto un camino de acciones enfocadas a la reutilización y el aseguramiento de la no contaminación del entorno natural de nuestros eventos”.

Aquella decisión se tomó desde el compromiso medioambiental de la Estropatada, con la sociedad y WOP sensibilizados con los plásticos en entornos naturales y, especialmente, en el entorno marino. Aunque WOP recogía todos los patos en cada uno de los lanzamientos, generaba una imagen atemporal y contracultural al lanzar un plástico al río. “Esa imagen y el mensaje no nos hacía estar confortables. Fue de mucho impacto para nosotros, porque el elemento central de la Estropatada eran los patos y renunciamos a esa imagen, adaptándolo a un elemento natural como las piñas de pino, asumiendo que el elemento deslucía. Pero fue una renuncia que debíamos hacer. Trajo consigo un sacrificio económico por la inversión que habíamos hecho en patos, había más de 1.000 diferentes. Entendemos que la decisión se comprendió, pero generó a la vez un pesar porque el evento deslucía su imagen por la eliminación de los patos. Años antes de esa decisión, WOP lanzó el estudio de alternativas a los patos de plástico como elemento de la carrera. Y la búsqueda ha dado ya su fruto, precisamente en nuestra tierra”, declara Renteria. Y esa búsqueda tuvo resultados cerca de casa.

LA HISTORIA DE UN PATO FABRICADO CON MATERIALES DE ORIGEN VEGETAL

En 2018, un consorcio del que forman parte las empresas vascas Urlaplast y Rotobasque, expertas en la transformación de materias plásticos mediante moldeo por inyección y rotomoldeo, y el Centro Tecnológico GAIKER, miembro de Basque Research & Technology Alliance (BRTA), de Zamudio (Vizcaya), empieza a trabajar en el proyecto Susgear.

Con esta investigación se buscaba, y se logró con éxito, desarrollar nuevos productos y procesos para el sector pesquero realizados con materiales innovadores biobasados y/o biodegradables. Los materiales debían poder procesarse, fundamentalmente, mediante moldeo por inyección y rotomoldeo.

Se trata de un paso dentro del enorme reto para conseguir desarrollar materiales y procesos industriales que den lugar a elementos que cumplan con su función y utilidad, y a la vez, que tengan características bio en cuanto a su origen y/o fin de vida. WOP ha hecho una fuerte inversión para que los patos vuelvan y sean fabricados en las empresas Urlaplast y Rotobasque.

Estos nuevos patos se han fabricado con materiales que permiten su durabilidad y que están certificados como compostables en planta de compostable. Asimismo, los patos se han procesado en un molde específico, diseñados para los patos WOP, y se han desarrollado con el mínimo espesor posible, lo que los hace más sostenibles debido al menor consumo de material en su fabricación, al mismo tiempo que potencia al máximo la velocidad de su desintegración futura.

Se trata de un esfuerzo económico muy importante para WOP que ha encargado, además, la fabricación de moldes específicos para la fabricación de sus patos de carrera. “Hoy podéis ver los nuevos patos. Se trata de un ejercicio para avanzar en nuestro esfuerzo por la sostenibilidad. A pesar de que nuestra misión es la lucha contra las enfermedades neurodegenerativas, los aspectos medioambientales son transversales a nuestros procesos y eventos, que se desarrollan en el entorno natural. Es un camino en el que cada vez estamos más concienciados como sociedad; un camino que está claro que no estará exento de renuncias a los niveles de acabado y costumbres de uso asociado a los plásticos tradicionales y sacrificios económicos hasta que el I+D se industrialice y socialice con alternativas bio. La Estropatada 2021 será un pequeño paso en ese camino para nosotros. Un paso imperfecto, pero un paso con el que estamos comprometidos y emocionados”, explica Renteria.